Para empezar estas crónicas quiero hablaros del restaurante de Barcelona con mejor relación calidad precio. Un local sencillo con una calidad descomunal. Funciona con dos velocidades: de lunes a sábado ofrece al mediodía, una carta corta y de precio razonable (dos platos y postre por 25€) con vinos (pocos) muy ajustados, entre los que destacan los de Montsant. La carta se mantiene toda la semana. De Jueves a Sábado abre por la noche con una carta con precios un poco más altos. Generalmente concurrido es necesario reservar para asegurar el tiro. Tiene diez mesas y un reservado para seis comensales. Para la sobremesa dispone de licores de calidad. Se esmeran con el café. El servicio es ligero. Nunca tendrá una estrella Michelin… ni falta que les hace. Decoración de madera blanca y sillas cómodas. Iluminación suficiente aunque no es la decoración su plato fuerte. En navidad hace platos para llevar como sus extraordinarios canalones de pato y trufa.

Algunos platos nunca faltan en la carta: los arroces, tipo rissotto o arroz ciego se comen con un solo cubierto y varían de semana en semana: calamares y alcachofas, gambas… ; la pasta, variada y de variada condimentación: macarrones rellenos, lasaña, raviolis, con especial mención a los canalones de pato y trufa; las cocas de sardina ahumada o tataqui de atún, sobre hojaldre crujiente y verduras (aguacate); las legumbres: garbanzos con cap i pota o gambas, las lentejas con ibérico; el bacalao cocinado a baja temperatura, etc. Los purés de patata tipo permentier con huevo a baja temperatura resultan deliciosos; los calamares a la plancha con guarnición, el roast-beef, el atún -pocas veces presente, por respeto, pero sensacional cuando aparece-;  el bistec tartare, excelente. Los postres son pocos pero elaborados. También dispone de unos pocos entrantes de aperitivo como jamón ibérico, anchoas, aceitunas, etc.

Podéis consultar su web: embatrestaurant.com o utilizar su mail: embatrestaurant@gmail.com en el que aparece una reseña del cocinero: Santi Rebés. El embat es de esos restaurantes que hacen clientes incondicionales a los que no es difícil conocer porque repiten. Un restaurante en el que el azar no juega. Cualquier plato que pidas será exactamente como la primera vez que lo probaste y eso que no repiten con facilidad. Imprescindible.

El desgarrado. Noviembre 2019.