» 16-05-2021 |
El inveterado populista M. A. Revilla convierte su entrevista en la Sexta (16/05/21 “Liarla Pardo”) en un mitin. Hasta veinte veces la periodista trata de interrumpirle sin que el político le haga ni puto caso. ¿Por qué? Porque sabe que le van a preguntar por el renuncio que supuso que le pillaran comiendo en un interior y fumando (todo lo que estaba prohibido). Alarga las contestaciones, se da autobombo, dilata y repite con tal de que no llegue la pregunta del millón. La periodista intenta infructuosamente interrumpirle, pero él, erre que erre, continúa con su estrategia. En un momento dado le dice a la periodista que es que no la oye (hasta ese momento la había oído). Todo su carisma de populista simpático y dicharechero se derrumba. Es un pobre (humanamente) político asediado por una realidad que él mismo ha provocado. Un documento imprescindible para entender la miseria de los políticos.
La periodista le propone que se retracte, que reconozca que se ha equivocado, que recule. No. Empieza por negar la mayor: no estaba prohibido. Evidentemente no aporta ninguna prueba. Y así continúa el acoso que no llega a ningún sitio razonable, la periodista preguntando y él mintiendo. Revilla es un político fetiche para la Sexta. Aparecía día sí y día no. Pero vemos como se desmorona ante la cámara. Vemos todas sus argucias, mentiras, renuncios y balbuceos. Vemos la mentira en directo. Es fastuoso ver a un político prestigioso (en el sentido de apreciado por el público) mentir para defender su culo, equipararse a todos sus compañeros. Espectáculos como este son esclarecedores: la mentira en directo, la ignominia de la charlatanería opacidadora. La democracia plena que nos vende el Gobierno y la oposicón.
No me extenderé más porque no es necesario. Buscar el documento en la Sexta o en Youtube. Es toda una lección de lo que son los políticos predicando lo que ellos no están dispuestos a cumplir: basura. No dimitirá porque Cantabria es él (piensa). Se le podría perdonar que sea débil y se salte las normas pero no se le puede perdonar que mienta para salvar el culo. Eso no es de recibo. Pero él, es así: soberbio. Y así le irá a partir de ahora. Adiós Revilla. Perdemos un gran comediante pero quien sabe si ganaremos un payaso honrado. En cualquier caso no eres mas que una gota de agua en el océano de la corrupción.
El desgarrado. mayo 2021.