Aznar dejó un partido unido y libre de corrupción. No pone la mano en el fuego por nadie (entrevista en la Sexta con Ébole). Casado no se responsabiliza del anterior partido porque él, tiene tolerancia cero con la corrupción. Como en el chiste de la rana… han jodido al cocodrilo. Los animales verdes no se identifican con la corrupción. La pinza es clara: la corrupción “solo” existió en el gobierno de Rajoy. Se acabó aquello de prietas las filas. Y eso es una novedad en el PP. ¡Qué cada uno se apañe como pueda! O lo que es lo mismo: ¡han jodido al cocodrilo! Es evidente, que prevén, que habrá sentencias sustancialmente negativas para el partido y empieza la desbandada. No deben estar muy seguros de que Bárcenas no tiene nada… o se están volviendo prudentes. Entre el pasado impecable del partido, y su actualidad y futuro, existe un lapso de iniquidad: Rajoy. Para que quede claro, Casado renuncia al pasado “malo” del partido sin renunciar al pasado bueno. Pero la cronología es clara: Lo malo del partido es Rajoy. Que pasado y futuro (Aznar y Casado) hayan aparecido juntos en los medios es como decir que Rajoy es el chivo expiatorio.

Hacía tiempo (quizás nunca) que las cuchilladas entre compañeros de la derechona no eran tan sobre-cogedoras. Casado salva a Aznar; Aznar salva a Casado. Nadie salva a Rajoy. Y sin embargo todos sabemos que la trama corrupta del PP no la “inventó” Rajoy ni la disolvió Casado.  Postureo político. ¡Sálvate como puedas! El partido es más importante que los personajes pero son los personajes los que deciden el destino del partido. ¿Por qué da una entrevista Aznar a la Sexta (a la que odia profundamente)? Es fácil: porque quiere dar un mensaje a la izquierda (o por lo menos a la no-derecha, es decir, a VOX). Aznar quiere reivindicar su figura política, ante España y ante su propio partido. Si hubiera dado la entrevista a un medio de su cuerda, nadie se hubiera interesado porque se hubiera entendido que era propaganda. Había que enfrentarse con el enemigo, y para ello, se preparó a conciencia. No le tembló el pulso en ningún momento, excepto  en las armas de destrucción masiva. Ahí sobreactuó, porque eso lo tenía demasiado ensayado. Pero es significativo. No quería defender a la derecha sino defender su imagen, lo único que le interesa. Por cierto: Ébole no preguntó por Botella. Evidentemente estaba pactado: ¡de la Botella, ni el culillo!

No olvidemos que Aznar suprimió las Spitting images (el guiñol político de canal plus) porque no podía soportar que lo ridiculizaran. Su fiel escudero Rajoy -en su mandato- estableció/endureció los delitos de odio, de enaltecimiento del terrorismo, contra la religión, y contra el honor, así como promulgó la ley mordaza, para que los prebostes de la nación no “sufrieran” las críticas (incluso escraches) del populacho. ¡Así te lo agradecen! Casado no nos ha dado todavía la medida de su capacidad represora/defensora porque no ha gobernado, pero no os quepa duda que imprimirá su huella en la jurisprudencia española. Pero lo que me gustaría destacar, es esta guerra para deslindar responsabilidades, que -como he dicho antes- es inédita y enormemente significativa. Si en la derecha se dejan de apretar las filas, podemos asistir a escenas magníficas. Podemos estar seguros que en las otras formaciones ocurrirá lo mismo porque ese descaro se proyectará sobre las otras formaciones, afectándolas.

La izquierda es vocinglera y deslenguada. La derecha es educada y disciplinada (la educación religiosa, pesa). Los medios han apostado cada día por su descomposición, y sin embargo, no lo hacen por la descomposición de la derecha. Pues bien. Mientras miraban a la izquierda, se les ha descompuesto la derecha y nadie (como en el caso del árbol de Witgenstein) estaba mirando. No siempre lo más probable es lo más posible, y en este caso, os han pillado con el culo al aire.  Así es la vida: inopinada. ¿No os parece noticia que Aznar y Casado le hagan la pinza a Rajoy? ¿No os parece que se desencadene una guerra de responsabilidades en el PP? Esa bizquera, de no acertar donde hay que mirar, es más que un fallo en un buen periodista. Es una cagada monumental. Ahora tendréis que aguantar que habéis perdido la apuesta: las cuchilladas no están en la izquierda sino que se desarrollan en la derecha.

Cuando las ratas abandonan el barco es que éste se hunde. Aznar ha salido en un medio “centrado” porque quería dar un mensaje “urbi et orbe”. Casado renuncia al pasado de su partido, balcón incluido, porque sabe que el desastre está a punto de producirse. Bárcenas sabe (puede demostrar más) de lo que parece. Si se dilata en publicar su información es para dar oportunidad de “arreglo” (si en algo el PP tiene razón es que es un delincuente, o mejor dicho, otro delincuente, ni el primero, ni el último). Entre pillos anda el juego pero los medios no se enteran de nada y cuando, en un país, los medios no se enteran de nada, eso no es un país, es una república bananera, como USA, sin ir más lejos.

El desgarrado. Marzo 2021.