Dice Agüado que Iglesias se alegra cada vez que pegan a un policía. Mendizabal le da la razón en MVT. Dice un locutor en el mismo programa que Las declaraciones de los dirigentes de UP “echan leña al fuego”, es decir, atizan la revuelta. Dice Diaz (tan influida siempre por la política trumpista) que Iglesias incita a los manifestantes a la rebelión (?). Todos se desgarran las vestiduras porque los dirigentes de UP no condenan la violencia de los jóvenes. Para muchos es inconcebible que alguien que está en el gobierno pueda tener ideas propias al margen del monolitismo que esperan que sea la norma en un gobierno aunque nunca lo ha sido, ni siquiera en gobiernos monocolores. La idea que subyace a todo, es que UP no es de los nuestros, son putos radicales que se disfrazan de humanos pero que guardan las armas escondidas en el traje para sacarlas en cuanto se presente la ocasión. Aguirre remata diciendo que Hasél es un delincuente común conocido y no una víctima de la libertad de expresión, no antes de decir a Mendizabal cómo debe llevar su programa.

Los niños aprenden que existen diferencias de género y a cuál pertenecen sin que nadie se lo explique. Saben sin que se lo señalen, que de sexo es mejor no hablar. Los jóvenes también aprenden que la democracia no existe (o por lo menos no es plena) y lo saben -sin que nadie se lo diga- porque tienen un paro del 50%, porque pueden ir a la cárcel antes de poder votar, no existen canales de participación democrática fuera de la rendija electoral, el sistema electoral está sesgado, porque las mujeres son ciudadanas de segunda clase (en oportunidades, sueldos, consideración y respeto), y, como -en esta ocasión- sus iconos generacionales, son encarcelados en aplicación de un CP manipulado por el PP (y consentido por el PSOE) por practicar la libertad de expresión. Todo eso es, para los niños y los jóvenes, el ambiente en el que crecen, el contexto en el que se crían.

Defender que esto es una democracia plena solo está al alcance de los demagogos y los populistas. Encarcelar a raperos, blogueros, cómicos, titiriteros, blasfemos, críticos, etc. no se puede llamar democracia. Como ha dicho Diaz de Madrid, Hasél no puede ser un artista amordazado, porque no es artista sino un borracho en un Karaoke sin ningún arte. Ahora la asesina de Madrid es crítica de arte. No insistiré porque hace años que he abundado en la idea que esto no es sino una mierdo-democracia en la que somos rehenes de unos políticos para los que esto es su jardín en el que solo pretenden forrarse, obtener prebendas, y ejercer un ansia de poder que les retrata suficientemente.  Lo asombroso es que, siendo como son los déficit  evidentes e innumerables, ellos sigan mirando hacia el otro lado, poniéndose de perfil y defendiendo que el rey está vestido. Como mucho la democracia es una ficción, un bluff en el que todos aprietan para que se cree un consenso de que esto es normal. Lo que Rancière llama “el consenso”, la ficción de que todo es normal, que la cuenta cuadra, que no hay contradicción entre la sociedad política y sí misma. Y no lo digo yo. Lo dicen Rancière, Agambem, Lyotard, Derrida, y si me apuran, hasta Arendt. ¿Un millón de moscas (cojoneras) pueden estar equivocadas. La mierda es mala?

Me sigue pareciendo asombroso. Argüir un contubernio para construir una ficción que no se sostiene ni con muletas, con tal de no reconocer que esto es una mierda, -probablemente para salvar su culo, puesto que esta ficción es su obra-, es más que asombroso, es delirante. UP han sostenido la ficción durante años. Ahora parece que se han cansado de fingir. Primero denunciaron el déficit democrático y ahora se niegan a condenar la violencia que los niños y los jóvenes (como en el cuento del rey desnudo) han emprendido contra una democracia que no les da ninguna oportunidad. Estamos llegando al cabo de la calle. No dar futuro a los jóvenes no es una buena idea por pingües beneficios que pueda reportar a los capitalistas de gestión. No se puede matar la gallina de lo huevos de oro. Esto no es una revuelta más. Es la revuelta de los jóvenes contra unos mayores que en vez de un futuro han construido un delirio, una ficción, un bluff.

Los USAnos acaban de exonerar a su presidente por un golpe de estado. ¿Es eso democracia? Nosotros hemos exonerado a Cifuentes tras la declaración de testigos que la condenaban. ¿De verdad no comprendéis porque no entendemos que esto sea una democracia?. La división azul (los prohitlerianos españoles) acusan a los judíos de todos los males (¡el tiempo no pasa!), Un juez del TSJ; Concepción (que ya se opuso a la exhumación de Franco) declara que los comunistas (en el sentido de totalitaristas, radicales, criminales y desalmados) están en el gobierno, la ultraderecha gana escaños a marchas forzadas mientras la derecha democrática niega que la moción de censura sea democrática, los parlamentarios herederos de ETA sean legales o que UP pueda estar en el gobierno. Nuestro anterior jefe del estado está en el exilio porque prefiere estar junto al dinero que ha robado que junto a su familia… con el apoyo del bipartidismo. El PSOE aprovecha una reforma de la ley de protección de datos para apoderarse de los datos electorales de los ciudadanos. Los juicios por corrupción son omnipresentes. ¿Seguro que eso es democracia? ¿Cómo es posible que estéis tan ciegos? Hasta el virus parece que se pira.

El desgarrado. Febrero 2021.