Reino unido -en plena 5ª ola y ascendiendo- anuncia para el 19 de Julio la liberalización de todas las medidas anti-covid. Supone un cambio de modelo: el tránsito de un modelo de convivencia matizada con medidas reguladoras, a un modelo de convivencia libre, de responsabilidad individual. Bien es verdad que Johnson apostó inicialmente por este modelo, pero reculó cuando se infectó. Ahora vuelve a su primera idea, mostrando que esa es y era su idea matriz sobre el tema. El Brexit fue una idea ultraliberalista. Zafarse de la tutela de la UE es, ni más ni menos, que la desregularización de la economía a la manera que hizo USA hasta causar la terrible crisis del 2008. Hay que pensar que la City de Londres es el centro mundial de las finanzas y las finanzas necesitan (para jodernos a todos) la desregularización.

Porque la pandemia nos ha distraído de lo que realmente está sucediendo en el mundo occidental desde los ochenta de Thatcher y Reagan: el desmantelamiento del estado del bienestar. El SXX propuso un modelo económico-social innovador: aumentar astronómicamente los impuestos para conseguir una sustancial mejora del nivel de vida de los ciudadanos. Se llamó el estado del bienestar. Pero no todos estaban de acuerdo. Los liberales nunca han estado de acuerdo con que el Estado intervenga en las cuestiones económicas. ¡Bueno! Para ser exactos no están de acuerdo en que intervengan cuando la iniciativa privada puede asumir el liderazgo. En otras circunstancias: investigación básica, subvenciones, rescates bancarios, fiscalidad no progresiva, paraísos fiscales, contubernio políticos-empresarios, etc, están totalmente de acuerdo. El desmantelamiento consiste en la privatización de todo lo que es institucional: sanidad, educación, empleo, pensiones, paro, servicios público (recogida de residuos urbanos, suministro de aguas, servicio de correos, red nacional de electricidad, TV), etc. Todo ello sin disminuir los impuestos. Los USAnos lideraron su revolución contra la metrópolis al grito de “no a los impuestos, sin derechos políticos”. Es obvio que se han olvidado.

Ahora UK da otra vuelta de tuerca y pretende privatizar la lucha contra la pandemia. La salud -dicen- es un derecho individual y por tanto la lucha contra el virus  también debe serlo. El año que viene las vacunas serán de pago y el tratamiento paliativo tendrá que pagarse individualmente. Ese es el meollo de la cuestión: el desmantelamiento… que pensábamos que el ultraliberalismo de Thatcher había rematado pero que Johnson pretende continuar. Los políticos y los empresarios necesitan mucho dinero para mantener sus niveles de vida y ese dinero saldrá de la destrucción del estado del bienestar sin -lo que sería lógico- la reducción de los impuestos. Los ciudadanos se han convertido en la gasolina de la economía (tal como vaticinó “Matrix”) y ante la expectativa de la robótica, que expulsará de la industria a todos los trabajadores, es necesario tomar posiciones. El paro y la pobreza van a subir exponencialmente y los ultraliberales no quieren pagar la cuenta (ni siquiera si se encarga el Estado). Estamos ante un ajuste de cuentas histórico entre los tradicionales dominadores legitimados por la sangre, la fuerza, el saber y los desheredados demócratas cuyo único título es no tener ningún título de legitimidad (Rancière).

No hay estrategias parciales, solo son cortinas de humo. La estrategia es la dominación, el expolio, el chupasangres. El capitalismo desbocado se le ha escapado de las manos a sus promotores (el club de Roma, el G7, los illuminatti…). El individualismo genocida lo quiere todo y lo quiere ahora. Empresarios despiadados, financieros insaciables, políticos corruptos. Estamos ante la robotización y eso requiere posicionarse. Su trabajo empieza por el desmantelamiento del estado de bienestar. Después vendrá la crueldad extrema: mandar a los niños a la pobreza y la exclusión; mandar a las mujeres a casa para dejar sitio; condenar a los trabajadores industruiales al paro definitivo. Pero no antes de emprenderla con los migrantes, los altersexuales y los “radicales”. ¿Seguro que el virus es lo peor?

El desgarrado. Julio 2021.