Un transeúnte circulando por una calle cualquiera; Quizá no exista una imagen más representativa ni más inquietante lo urbano.
Cualquier ciudad, cualquier calle, resultan ser extensiones de la palabra.
Una calle nos recuerda otra, y así sucesivamente las palabras – las voces entremezcladas- reverberan en el tiempo, formando un eco que reinventa al individuo, plasmado las diferentes fases de la vida en su tránsito por la cotidianidad.