“A flor de piel” es un diario autobiográfico en el que mi cuerpo es el soporte.
Sobre él escribo la historia de mi vida. Por medio de cosidos reales realizados sobre la palma de mi mano, retrato los rostros de todas esas personas que, de alguna forma, me han marcado a lo largo de mi vida; familia, amigos, parejas, profesores...
Sus vidas se han entretejido con la mía para construir mi historia, una historia que finalizará cuando me quede sin hojas sobre las que escribir.